miércoles, 24 de junio de 2020

El hueco ( Gestación del vacío)



No fue en cuarto menguante...

Ni el inquietante aullido de los perros,
que huelen las tragedias,
alborotó las tapias.

La noche del estrago
llegó sin avisar.

El corazón
notó que congelado quedaba su latido
al sentir el mordisco pavoroso
del desamor.

Después,
quién sabe cómo,
el hueco
fue ocupando lugar, ganando espacio
a expensas de lo vivo y su dolor.

Enorme vientre inverso,
en el alma gestante apenas hubo
señales de aquel mal , que , soterrado,
carcomía su entraña.

Ya ni siquiera soy un manantial
de bilis corrosivas.

De mí hoy solo queda
este vacío ingente ,este imposible
afán por vomitarse.

Esta atroz,
visceral,
abrumadora
y omnipresente náusea.

Sordera incorregible







Anidando en el centro
de la auténtica esencia de las cosas,
todas las cosas guardan,
un secreto escondido,
una sorpresa oculta allá en el fondo
de su pulsión más íntima.

Un ritmo que le marca la cadencia
al vaivén de los mares
y al danzar de la lluvia.

Que cantan con voz líquida los ríos,
reconoce la hierba ensimismada
y atentamente escucha
el corazón del pájaro

Una armoniosa música silente
que impregna el universo.

Aquella
para la que, embotado por los ruidos
que nacen de sus tripas,
presenta el ser humano
una muy acusada, 
tenaz
y lamentablemente  incorregible
tendencia a la sordera .

martes, 23 de junio de 2020

Último anhelo



Para mirar los ojos que me miran
repletos de ternura esperanzada,
para sentir brillando en mi mirada,
las cálidas ternezas que me inspiran.

Para enjugar las penas que suspiran
en tu respiración acongojada,
para espantar , velando tu almohada,
sueños sin luz que contra ti conspiran.

El tiempo que la vida me regale,
obsequiarlo en tu altar , a eso aspiro,
tal anhelo me aferra a la existencia.

Y el vivir a tu lado hasta que exhale
en tus brazos mi último suspiro
es cuanto pido ya a la Providencia.