Contrasentidos

Cuántos azules

caben bajo los libres

párpados quietos.

Sueño veleros

partiendo ,a la conquista

de los océanos.

Pero cómo ha de ser ,

cuando al cielo le pido

días sin viento...

El ratoncito Pérez ya no es lo que era

Dormir ,

dormir únicamente es lo quiero

y olvidarme

de este dolor de muelas

diario que es la vida.

Es extraño que igual

que hay quien persigue al sueño contando mil ovejas

yo solo vea dientes.

Tres hileras de dientes afilados...

Dios sabe de qué abismos submarinos

emergen las lampreas,

cuando ando buscando

blancos dientes de leche debajo de la almohada.

Después llega el catálogo

de Vital- Dent completo:

dientes de sierra,

dientes de sable,

dientes que lucen

filos hirientes

dientes que aterran ...

Todo con tal

de no mirar de frente

las odiosas  encías desdentadas

que nos dejan los años.

Aunque sea tan triste

y dé un poco de asco mirar como se ahogan

en el fondo de un vaso las radiantes

dentaduras postizas.

Conque dientes! Más dientes!

Que lo que jode al mundo, que te quiere joder

es la eterna sonrisa.

Ciertamente es extraño

el pensar solo en dientes

en las horas insomnes de las noches del hambre

cuando estás sin un beso que llevarte a la boca.

Aterrizajes forzosos

Quién dirá que no tiene un viejo anhelo

de conquistar el aire , sepultado

dentro de sí, que nunca fue olvidado

y florece en las noches de desvelo

Uno se sueña ingrávido, entregado

al ciego impulso de emprender el vuelo

hasta rozar las puertas de algún cielo

que en exclusiva tiene reservado.

Luego , con los destellos de la aurora,

cuando de despertar llega la hora,

es cuando te espabilas y aterrizas.

Y te ciñes de nuevo la armadura

de este ser de raquítica estructura

al que se empeña el mundo en hacer trizas.

De indomable criatura

capaz, aun siendo barro y luz oscura,

de arder y renacer de sus cenizas.