martes, 6 de diciembre de 2022

Sentires


Siento

que no debo sentir.


Que no es nada sensato

deleitarme con tanta insinuación

como me ofrece el Sol y su caricia

sobre mi piel, el aria

que me regala el pájaro,

el frescor de la hierba,

la flor, la nube, el río...


De dejarme llevar por el placer

de un oído que arde

si está junto a una boca,

bebiendo las palabras que destilan

unos labios ardientes.


De poder entregarme

un instante al recreo.


De soñar la locura

de esos cielos azules,

sin más sombra que un ala en libertad

que vuela tras la estela

gozosa de otra ala.


Siento

que no debo sentir

y dejar que se incruste la ilusión tan adentro,

allí donde arrancarla

es imposible.

Y duele.


Siento

lo que debo sentir,

la desazón de huesos y el olor a esa lluvia

que suele malograr los espejismos.

 

Ceguera


 

Después de tanto andar

en busca de un atisbo

de luz,

sentirse a oscuras...


Y en ascuas.


Soportando

la mortificación por seguir preguntándose

si habrán sido los pies en su errar los que hicieron

tan errado el camino

o habrá sido el trazado tortuoso de la senda

el que torció tus pasos.


¿ Y hasta dónde la suerte?

¿ Hasta dónde tu empeño

de doblegar su brazo?


Lo mismo que vilanos, que en el aire

desbaratan los dedos de la brisa,

flotan las dudas.


Ciertas

no lo son ni tus huellas más patentes,

esos versos parduzcos

grabados sobre el barro.


La lluvia del olvido

no gasta miramientos.


Después de tantas millas,

tantas lágrimas

y tanto ahínco en el ensayo error,

todavía no sé a dónde voy

ni de dónde provengo.


Definitivamente

andar a tu albedrío, en libertad,

no es el ejercicio

más apto para ciegos.

domingo, 4 de diciembre de 2022

Sin remedio



Nunca sé bien por qué razón trastea

dentro de mí un runrún que se traviste

con pretensiones de llegar a idea

y juega con mi lógica al despiste.


Quiere martirizarme y se resiste

a dejarse atrapar, revolotea

igual que un moscardón y tanto insiste

que tengo ya una buena cefalea.


No hay remedio...de forma compulsiva

persigo esa intuición que le rezuma

a una frágil coraza sensitiva.


Sabe que no le sirve serme esquiva,

si la tengo en la punta de la pluma...

! Y no pienso rendirme mientras viva!