jueves, 28 de noviembre de 2024

Pizca


 

No sé qué más hacer, ni qué inventarme

para adornar al tiempo sin matices

que hoy vivo y no logro ya tragarme

los cuentos de banquetes con perdices.


Por mucho que procuro ensimismarme

recordando otras horas más felices,

apenas si consigo no enfrascarme

en lamerme las viejas cicatrices.


Rebrota así el dolor, lo que hace urgente

exprimir la maltrecha fantasía

y extraerle esa pizca efervescente

capaz de devolverme la alegría.


Que me evite caer inútilmente

en el marasmo de la melancolía.