El animal exahusto se acurruca
sobre sí
y se permite
escuchar lo que dicen sus instintos
Transitar de puntillas
sobre la superficie de las horas
y pasar por la vida sutilmente,
como el pez se desliza sobre el agua
sin dejar ni una huella.
Y alienarme
con la desesperanza y la apatía
que abruman el ambiente.
Esto es todo
a lo que ahora aspiro.
Debe ser que me falta
el aliento vital.
O me sobran catástrofes
El caso es que no alcanzo
a continuar remando más a contracorriente.
El cuerpo pide a gritos
un poco de reposo,
lo mejor es dejar que pase el tiempo
y correr sobre él
veladuras de niebla
y de estupor
Mañana
sé que será otro día
tan bueno como hoy o como ayer
para seguir luchando y anotando
sobre la piel derrotas.
Para seguir llorando,si el capricho
del azar lo decide
o un Dios impío quiere .
Si es que no viene antes, compasiva,
la muerte a remediarlo.