Solamente
es tristeza
esa
licuefacción disimulada
que
me suele aflorar en la mirada
y
de luz y esplendor me la adereza.
No
pudo la zarpada
de
la ira cobrar tan mansa pieza
ni malograr su brillo y su limpieza
estampando
su rúbrica acerada.
Tampoco
el dolor pudo
vaciarla
de expresión , ni el desencanto
vestirla
de un rigor austero y crudo.
Y
aunque hay que acorazarse - pues resiente
vivir - sobre mis ojos ves un manto
de
infinita tristeza , solamente.
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