sábado, 14 de mayo de 2022

Los grumos del silencio


 

!Ale hop !

¿ Dónde fue la tersura

de la piel,

aquel pétalo

que solía dejarse requebrar por la aire?


Fue en un visto y no visto...


¿ Qué mirada insidiosa

marchito tu inocencia?

¿ Quién borró tu sonrisa?

¿ Cuándo arraigó en tu ánimo

la semilla del miedo?


Como un hábil ladrón

de dedos codiciosos e insaciables,

nos desposee el tiempo de todo lo que fuimos,

de todo lo que amamos.


Hasta que llega el día en que sin darte cuenta

reparas en que ya solo posees

unos manos vacía,

unos ojos escépticos.


En que a pesar de tantas oquedades

que han dejado las pérdidas

te pesa el corazón.


Y más que nada abruma

esa mudez del aire detenido

acechando algún eco que disipe

la sensación inmensa

de soledad.


De yerto

territorio asfixiado en su mutismo,

al que nunca conforta

ninguna voz humana.


Llorarías,

si es que acaso las lágrimas sirviesen

para hacer florecer a los desiertos.


Callas

e intentas escuchar, tendiendo redes

atentas con tu oído.


Por si es que todavía

el cielo te concede un último milagro


Por si puedes aún recolectar

de este espacio vacío sin rumor que te envuelve

los grumos del silencio.


Reinventar el sonido

primero,

elemental

indispensable.


Volverte a oír por dentro.

miércoles, 11 de mayo de 2022

Frustración


 

Seducís a las damas con finura,

zapatos de tacón de tafilete,

por mucho que la horma les apriete

hasta hacer imposible su andadura.


Exquisito instrumento de tortura

de sufridoras natas, que promete

propiciar el incordio de un juanete

o al menos una buena torcedura.


Hoy sois mi frustración, qué más quisiera,

que poder pasearos por la acera,

aunque tal postureo me maltrate.


Pero es que ya me duelen las rodillas,

y voy tan a gustito zapatillas...

Quedad con Dios en vuestro escaparate.

domingo, 8 de mayo de 2022

Ave Fénix


 

Son una nebulosa,

un aura sonrosada

anclada a la memoria quebradiza,

aquellas primaveras previsibles

que llegaban vestidas de promesas,

perfumadas de anís

y de insinuaciones.


Quisieras comprobar

palpando su textura,

si fue verdad la dicha que aún

en las noches sin sueño el corazón recuerda,

pero apenas la roza el pensamiento

tirita  y se deshace,

cubriendo de humedad desconsolada

el ya triste rincón que es tu presente.


¿ Dónde hallar

el ascua que evapore

los retazos de niebla que impiden a tus ojos

brillar

y concebir igual que antes

esperanzas utópicas?


En este tiempo herido

por la caducidad,

¿ a qué Dios compasivo he de pedirle

que le ordene al infierno que me obsequie

un amor que me inflame?


Solo cuando nos vencen las pasiones ocurre

que las pieles se incendian y las almas se abrasan.


Y una nueva ceniza

da vigor al sustrato soñador e invencible

que alimenta al espíritu.


Y la ilusión renace.

Hablemos del amor


 

Hablando del amor, lo previsible

es dejarse llevar por un manido

arranque de lirismo, tan florido

que puede resultar hasta risible.


Y quién puede decir que no ha tenido,

hablando del amor, la irresistible

tentación del insulto más terrible,

recordando las veces que lo ha herido.


Hablemos del amor sin tintes rosas,

diciendo la verdad, que más amable

puede hacernos la vida en ocasiones.


Y en otras, con sus tácticas tortuosas,

les causa un sufrimiento insoportable

a nuestros insensatos corazones .


Reset


 

Es medianoche, hora fronteriza

entre un hoy que ya va de retirada

y un mañana que tiende su emboscada

a tu viva materia quebradiza.


En la penumbra flota una huidiza

sensación de que no sirve de nada

la resistencia tan empecinada

cuando la poquedad se interioriza.


Todo tu cuerpo pide un armisticio

y claudica tu alma ante el trasiego

de unos  días de plomo vitalicio.


Rezas pidiendo al cielo el beneficio

del sueño y su regalo de sosiego.

Que puse el alba el botón reinicio .