sábado, 2 de septiembre de 2017

Ese bendito don


En la tarde letárgica de Agosto
una antigua cadencia, ya olvidada,
se cuela sin permiso por la ventana abierta
y asalta mi memoria.

Una imagen regresa a mí retina
esa plaza, esa fuente,
esas muchachas
alegres como pájaros, que al aire le confían
cantando los secretos de su amor.

Ese revoloteo
de rapaces jugando entre risas y gritos

Sentir paz y quietud.

Imaginar que tiene su lugar
cada cosa en el mundo.
Presentir
que cada cosa estaba allí en su sitio.

Gozar de aquel paisaje de armonía
optimista, confiado e inocente
del que, al igual que el aire o los insectos,
también yo, nimio ser tan prescindible,
 era parte vital.

Y no saber que el cielo, en un impulso
inusual de clemencia
se prestó a bendecirnos, regalándonos
ese bendito don de la ignorancia.

Porque en  aquellos días inefables
no cabía el futuro ...

Felizmente.




lunes, 28 de agosto de 2017

Esa


Ese libro, que espera que lo abras ,
pacientemente ahí, sin saber cuando
podrá entregarse a ti, amenizando
tu vida con su ofrenda de palabras.

Esa rosa que muere de impaciencia
soñando que unos dedos la cercenen
antes de que los años la condenen
y a cambio darles su mejor esencia.

Esa música tersa que deslumbra
el aire y de ilusión pone su broche
sobre la melancólica penumbra

Esa lámpara humilde que acostumbra
a ser fanal en medio de la noche,
Luz del Norte que guía y no relumbra.

Esa mujer de pecho generoso
que aguarda noche y día sin reproche
para hacerse el sosiego del pecho de su esposo










E.T.E.



Sabed que aunque a veces me pierdo y me demoro
en mi andanza andariega,volver hasta estos
 muros
que al resguardo del mundo se me ofrecen seguros
es lo que más añoro.


Camino de regreso
sabiendo a ciencia cierta que nunca se retrasa
aquel , cansancio y llaga, que vuelve hasta su casa
y que a la puerta esperan el abrazo y el beso.


Y si no vuelvo un día,
podéis jurar que nunca será por culpa mía,
es que a veces la vida decide por nosotros.


Cómo me reconforta
pensar que no hay distancias, que eso poco 
importa
si queda mi recuerdo viviendo entre vosotros.

Sorpresa


Qué buena consejera es la prudencia.
Y cómo se apresura a cortar manos,
no sea que nos creen dependencia
si les da por jugar juegos villanos

Lo que nunca nos cuenta es la frecuencia
con que sus procederes cirujanos
vuelven nuestro vivir inapetencia.
O el que luego nos sobran los pianos.

Porque el que no se arriesga jamás sabe
lo que pesa un revés, ni la alegría
con que responde el cielo si lo prendes


Que si soy o no soy ... Ni yo la clave
siquiera sé de mí , nunca podría
certificarme tal como pretendes.

Entrégate al azar de mi anarquía.


Y apuesta porque siempre te sorprendes

Ama(n)samiento


 Esta que soy ahora
nada tiene que ver con aquella que fui
 en los lejanos días
de vino dulce y rosas perfumadas
de mis  primeros años.

La blandura del barro que conforma
nuestra materia humilde,
meticulosa y  pacientemente,
a golpes a certados o con  sutiles gestos,
modela la existencia

Amasa nuestra carne,
tritura nuestros sueños
hasta que nos amansa los impulsos,
hasta que nos trasforma la sonrisa
en una mueca triste,
desganada
cargada de cinismo, de amargura
y de resignación.

Domesticar a pulso los indóciles,
audaces ,alocados, y magníficos,
corceles juveniles que corren por la sangre
no es tarea sencilla.

Pero se trata solo de darle tiempo al tiempo...

Logra siempre apagarte en la mirada
la luz  de la ilusión
hasta que apenas queda
el anhelo del polvo por regresar al polvo
y descansar.

Yo siento
últimamente ya sobre mis ojos
una insidiosa veladura líquida.

Hay que reconocerlo ,
que incansable, 
que hábil, que eficiente...

! Qué cabrona!
que sabe ser la vida.

domingo, 27 de agosto de 2017

Verdad desnuda


¿Qué enemigo invisible
le ha salido a las flores más sencillas?

¿Quién alienta y difunde
esa absurda, anacrónica,desigual competencia
de belleza y aroma?

Ha arraigado sin ruido en mi interior un germen
puro, esperanzador,
lleno de claridad.

No sé que viento trajo
hasta mi su semilla diminuta
solo sé que palpita
y crece
y busca el modo
de parirse , alumbrándome
con el descubrimiento liberador y alegre
de su verdad desnuda,
elemental ,
auténtica.

Con la verdad que al tiempo
me consuela y me asombra.

Que me va susurrando que la huella que deja
esa hermosura humilde ,que siempre va de incógnito
porque reside dentro,
nada ni nadie pueden llegar a marchitarla.


Oficio de penumbras


Lábil, revolotea el pensamiento.
La palabra es más lenta, pero vuela
hasta ponerse al pairo de su estela
por si puede servirle de instrumento.

Rebusca con fervor y atrevimiento
en su oculto sentido y lo flagela
hasta que sus misterios le revela
y consigue apropiarse de su aliento.

Luego queda enfrentarse al desafío
de la página en blanco, empecinada
de seguir virginal eternamente.

Y entregarse al ritual del desvarío
de escribir con su sangre sublimada
la esencia de la sombra que presiente.

Ven


No sé si andas perdido, amor, por las veredas
sinuosas de camino , si es que te has quedado
en sus agudas zarzas fatalmente enredado,
solo sé que tus caros favores me los vedas.

Yo ,que darte el obsequio de las sutiles sedas
que entretejo en mi alma con místico cuidado
y disfrutar tus dones siempre había soñado,
hoy veo que te olvidas de mí y me desheredas.

Porque solo en ti puse la íntima esperanza
de sentirme colmada y ser feliz un día,
ven , amor , a mi lado regresa sin tardanza

Permíteme que cumpla mi última utopía
de morir en tus brazos, sin sentir la añoranza
de no haber conocido la auténtica alegría.




Espejismo


Después de apacentar en soledad
mis rebaños de miedos sobre el inmenso páramo
de otra noche insomne,
un rayo de Sol tímido
golpea en el cristal de mi ventana.

Ya es un nuevo hoy.

Un día que amanece amortizado
de alegría y sorpresa,
en que seguir viviendo cuesta arriba
teniendo que cargar el pesado bagaje
de la desesperanza.

¿A qué clavo candente,
a qué afilada esquirla
de ilusión sin gastar me aferraré
para seguir sintiendo
que merece la pena continuar respirando?

Solo me queda el eco
de las voces que amé en la memoria.

Tras de su estela pálida camino.

Sé que son solamente
un espejismo bienhechor de lluvia
derramándose en medio del desierto.

Un rumor de humedad 
sostén de la demencia imprescindible
para seguir soñando que todavía queda
algún feliz mañana.