viernes, 17 de noviembre de 2017

Sin duda


No todo fue dejar correr el río
y sentarse a escuchar cómo entonaba
su líquido cantar , que apaciguaba
el ajetreo diario y su extravío.

No siempre fue tender menesterosa
la mano hacia el vacío y que al instante
apareciese en ella el confortante
regalo perfumado de una rosa.

También la vida tuvo sus espinas ,
supuró su hectolitro de veneno,
te obligó a tragar cal y luego arena …

Pero. a pesar de todas sus inquinas,
sientes que  respirar es algo bueno,
que, sin duda,  vivir vale la pena.


No hay comentarios:

Publicar un comentario