Necesito
mi tiempo , muy despacio
el
pulso voy tomando a la existencia,
a
imitar, por que sí, cualquier cadencia
mi
corazón se muestra muy reacio.
Ser la dueña y señora de mi espacio
es para
mí una especie de exigencia
irrenunciable,
con la competencia
por un
hueco vital no me congracio.
Nace de
ahí la urgencia y la ebriedad
de
distanciarme , la misantropía
que me hacer afrontar mi esencia y mi verdad
E
incluso a preguntarme si es que un día
me
llegará a pesar la soledad
como
me puede a veces pesar la compañía.
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