Yo
nunca tengo prisa.
Y
menos si no hay ningún ser vivo
que
salvar de un incendio, ni un motivo
para
perder el culo y la sonrisa.
Adelantar
la hora ¿ Para qué?
Por
mucho que madrugues, no amanece
antes
jamás, que al Sol no le apetece
hacer
tal paripé...
Es
tiempo aprovechado
el que
pasas mirando en las alturas
cómo
cambian las nubes de nariz.
Y vives
sosegado,
sin
más preocupación , mientras procuras
sencilla
y simplemente ser feliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario