martes, 20 de octubre de 2020

Flor de estufa


Los lirios te envidiaban.


Nunca hubo ninguno que luciera en sus pétalos

un malva más intenso y dolorido

que aquel que decoraba tus ojeras.


Después de que ,blindado a cicatrices,

tu yo hipersensible se volvió invulnerable

al rigor de las púas ,

los cactus te temían.


Pero acaba cansando

mantenerse en la pose

de víctima o de esfinge.


Porque las piedras, que te admiran,saben

interpretar tus gestos

y guardan el secreto de que solo en el mar

caben sin molestar todas tus lágrimas.


Ya no quieres seguir a la intemperie.


Toca buscar refugio ,

si es posible,

junto a un calor humano ,

que te haga recordar con devoción

lo que es la ternura y la tibieza.


Tú has sido desde siempre flor de estufa...


Y en cada amanecer desangelado,

vivido en soledad,

sientes que hasta las sombras

de las nubes te pesan.


Y cómo se te escarcha

en los húmedos ojos la acaricia

del aliento del frío.


 

No hay comentarios:

Publicar un comentario